El delantero brasileño ha añadido numerosas
condecoraciones individuales a su palmarés, así como títulos con
diversos equipos en los que siempre ha rendido de una manera
incuestionable.
Considerado por muchos como el mejor delantero de la historia, Ronaldo Luis Nazario, conocido simplemente como Ronaldo, se merece aparecer en nuestro apartado de los jugadores de leyenda. Nacido en Río de Janeiro el 22 de septiembre de 1976, fichó por el Cruzeiro a los 17 años gracias a unos números que le avalaban como una jovencísima promesa, pues en 57 partidos en la canarinha sub-17 había sumado 19 goles.
Dos grandes temporadas con el conjunto brasileño le abren las puertas de la selección brasileña absoluta, con la que añade a su palmarés el Mundial de 1994 de Estados Unidos pese a no haber disputado un solo minuto. Sin embargo, su simple presencia en el combinado nacional con 18 años y sus sublimes actuaciones con el Cruzeiro le sirven para dar el salto al Viejo Continente gracias al PSV Eindhoven.
En la entidad holandesa cumple con creces al firmar en dos temporadas 42 tantos en 46 partidos disputados. Además, sumaría una liga y una copa de los Países Bajos durante su etapa en Eindhoven. Esos registros y logros llamaron mucho la atención a los grandes clubes europeos. Sería el Barcelona el que se haría con sus servicios para la temporada 1996-1997, campaña en la que se consagraría como el mejor delantero de la época, puesto que firmaría 34 goles en 37 apariciones en liga y conseguiría su primer Fifa World Player.
Ronaldo se embarcó pues rumbo a Italia en el verano de 1997. Esa primera temporada lejos de España consiguió con el club interista la copa de la UEFA. Francia acogía en 1998 la Copa del Mundo, a la que Ronaldo asistió en plena forma. Sus intervenciones fueron algo intermitentes, pero con sus goles la seleçâo llegaría a la final, en la que caería con Francia por 3-0. Ese mismo año ganaría el Balón de Oro tras una gran primera campaña con el Inter.
Sin embargo, un encontronazo con Fernando Couto le haría recaer de su lesión hasta el punto de necesitar más de un año para recuperarse completamente. No disputó un solo partido en la campaña 2000-2001. Una última campaña con el Inter en 2001-2002, su mala relación con Héctor Cúper y un gran Mundial de Corea y Japón con la canarinha (marcó en todos los partidos excepto en los cuartos de final) le valieron para llamar la atención del Real Madrid. Ese año acabó siendo la Bota de Oro.
Con el Real Madrid firmaría cuatro campañas (de la 2002-2003 hasta la 2005-2006), en las que firmaría 82 tantos en liga en 120 partidos. Con la entidad blanca sumaría dos títulos de liga, una Supercopa de España, una Supercopa de Europa y una Copa Continental.
Una pésima última temporada y una mala relación con Capello le llevan a volver a Italia, en este caso al plantel del Milan. Apenas suma en dos temporadas 20 partidos y 9 goles debido a su problema de insuficiencia hormonal en la glándula tiroidea que se tradujo en un aumento de peso.
El 14 de febrero de 2011 acaba retirándose al argumentar un problema físico de hipotiroidismo. Dejaba entonces el fútbol uno de los mejores delanteros de la historia del deporte rey, que sumó 374 goles en 538 partidos oficiales, además de gozar del privilegio de ser el máximo anotador en la historia de los mundiales y alzarse ganador de dos Balones de Oro.
También forma parte del listado de los 100 mejores jugadores del mundo. Un jugador de leyenda en toda regla.
Considerado por muchos como el mejor delantero de la historia, Ronaldo Luis Nazario, conocido simplemente como Ronaldo, se merece aparecer en nuestro apartado de los jugadores de leyenda. Nacido en Río de Janeiro el 22 de septiembre de 1976, fichó por el Cruzeiro a los 17 años gracias a unos números que le avalaban como una jovencísima promesa, pues en 57 partidos en la canarinha sub-17 había sumado 19 goles.
Dos grandes temporadas con el conjunto brasileño le abren las puertas de la selección brasileña absoluta, con la que añade a su palmarés el Mundial de 1994 de Estados Unidos pese a no haber disputado un solo minuto. Sin embargo, su simple presencia en el combinado nacional con 18 años y sus sublimes actuaciones con el Cruzeiro le sirven para dar el salto al Viejo Continente gracias al PSV Eindhoven.
En la entidad holandesa cumple con creces al firmar en dos temporadas 42 tantos en 46 partidos disputados. Además, sumaría una liga y una copa de los Países Bajos durante su etapa en Eindhoven. Esos registros y logros llamaron mucho la atención a los grandes clubes europeos. Sería el Barcelona el que se haría con sus servicios para la temporada 1996-1997, campaña en la que se consagraría como el mejor delantero de la época, puesto que firmaría 34 goles en 37 apariciones en liga y conseguiría su primer Fifa World Player.
Esos números le valieron a la entidad azulgrana para ser el segundo clasificado de la competición nacional, pero los goles de Ronaldo sirvieron a los culés también para sumar una Copa del Rey, una Supercopa de España y una Recopa de Europa. Su caché entonces es tal que Josep Lluís Núñez no consiguió satisfacer sus exigencias económicas, pero sí el Inter.
Ronaldo se embarcó pues rumbo a Italia en el verano de 1997. Esa primera temporada lejos de España consiguió con el club interista la copa de la UEFA. Francia acogía en 1998 la Copa del Mundo, a la que Ronaldo asistió en plena forma. Sus intervenciones fueron algo intermitentes, pero con sus goles la seleçâo llegaría a la final, en la que caería con Francia por 3-0. Ese mismo año ganaría el Balón de Oro tras una gran primera campaña con el Inter.
La campaña 1998-1999 sería poco fructífera para él, ya que en 19 apariciones ligueras sumó 14 goles que no sirvieron para ganar un solo título. Sin embargo, el peor momento de su carrera llegaría al principio de la campaña 1999-2000, cuando frente al Lecce se rompió el tendón rotuliano de la rodilla derecha tras recibir una falta. Necesitó seis meses para recuperarse, tras los cuales tan sólo jugaría siete partidos y anotaría tres tantos.
Sin embargo, un encontronazo con Fernando Couto le haría recaer de su lesión hasta el punto de necesitar más de un año para recuperarse completamente. No disputó un solo partido en la campaña 2000-2001. Una última campaña con el Inter en 2001-2002, su mala relación con Héctor Cúper y un gran Mundial de Corea y Japón con la canarinha (marcó en todos los partidos excepto en los cuartos de final) le valieron para llamar la atención del Real Madrid. Ese año acabó siendo la Bota de Oro.
Con el Real Madrid firmaría cuatro campañas (de la 2002-2003 hasta la 2005-2006), en las que firmaría 82 tantos en liga en 120 partidos. Con la entidad blanca sumaría dos títulos de liga, una Supercopa de España, una Supercopa de Europa y una Copa Continental.
Una pésima última temporada y una mala relación con Capello le llevan a volver a Italia, en este caso al plantel del Milan. Apenas suma en dos temporadas 20 partidos y 9 goles debido a su problema de insuficiencia hormonal en la glándula tiroidea que se tradujo en un aumento de peso.
En febrero de 2008 volvería a lesionarse del tendón rotuliano, esta vez de la pierna izquierda. Tras necesitar nueve meses para recuperarse, es traspasado al Corinthians el 9 de diciembre de ese mismo año, equipo en el que sumaría 31 partidos ligueros en dos temporadas y media y en los que anotaría 18 goles.
El 14 de febrero de 2011 acaba retirándose al argumentar un problema físico de hipotiroidismo. Dejaba entonces el fútbol uno de los mejores delanteros de la historia del deporte rey, que sumó 374 goles en 538 partidos oficiales, además de gozar del privilegio de ser el máximo anotador en la historia de los mundiales y alzarse ganador de dos Balones de Oro.
También forma parte del listado de los 100 mejores jugadores del mundo. Un jugador de leyenda en toda regla.
